«Tendríamos que haber hecho mejor las cosas», es una de las ideas que recorre la formación Leer
En los últimos días en el PSOE son muchos los que se han llevado las manos a la cara ante la incredulidad y la impotencia de lo que veían. El caso Leire Díez ha dejado impactado al partido, como exponen los cargos y dirigentes consultados por este diario. Unos sentimientos de «frustración» e «impotencia» que se han visto aumentados por la gestión de Ferraz y el silencio del Gobierno. «Somos el PSOE, tendríamos que haber hecho mejor las cosas», es una de las ideas que recorre la formación.. Son muchos los que contraponen la manera de actuar con José Luis Ábalos, al que se le abrió de manera inmediata un expediente de expulsión, y la forma de proceder con Leire Díez. «Sólo se abrió un expediente informativo y no se avanzó nada», es el lamento de muchos. Esa falta de contundencia y de explicaciones, sensación bastante extendida cuando se palpa el partido, deriva en impotencia: «No nos queda otra que poner la otra mejilla», sintetizan en alusión a que ante la inacción, reciben un golpe tras otro de la oposición y sus propios socios. Ayer Yolanda Díaz elevó la presión al no ver suficientes las explicaciones socialistas y les reclamó «respuestas» y «medidas».. En La Moncloa defienden el silencio de Pedro Sánchez -lleva más de un mes sin responder a preguntas de los periodistas- en que no quieren amplificar un caso que califican de «mentira» y seguir engordando lo que ven como una bola de nieve. El problema es que muchos en el partido creen que esa bola puede pasarles por encima. «Han conseguido generar la sensación de lo que no es», se lamentan, ante el que pueda deducirse de que el PSOE o el Gobierno están implicados en los quehaceres de la fontanera Díez.. Uno de los dirigentes socialistas consultados, conocedor de las entrañas del Gobierno, analiza que el Ejecutivo no midió bien el impacto de este nuevo escándalo, que en La Moncloa y Ferraz pensaron que no escalaría tanto y ahora «están sorprendidos por el vuelo que ha cogido el asunto». Y uno de los cargos socialistas pone el foco en una cuestión no menor: «Leire tuvo más rango en el Gobierno que en el partido» – ocupó cargos en empresas públicas como ENUSA y Correos-.. Como sucede en el Gobierno, en el partido se lamentan por la imposibilidad de marcar la agenda y la iniciativa y que lo hagan otros. «Nos preocupa que el debate esté centrado en estas cosas».
España // elmundo
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