Vox necesita que dos parlamentarios de otros partidos se sumen para poder presentar esta iniciativa, pero no llamará a los ‘populares’ Leer
«Vox no puede hacer nada más de lo que hace». Es la sensación que cunde en las filas del partido ante la situación de «caos» originada por el informe Cerdán. Sin embargo, la formación aún quiere jugar una última bala. Tras exigir al PP que registre una moción de censura y topar con la negativa de Alberto Núñez Feijóo, Santiago Abascal sopesa ahora otra vía para que esa iniciativa llegue al Congreso: que sea Vox quien la presente. Pero, para ello, es imprescindible aglutinar el apoyo de dos parlamentarios más.. «Me siento legitimado para exigir que los diputados que no estén involucrados en la corrupción se unan a Vox para la presentación de una moción de censura», ha señalado Santiago Abascal desde la sede del partido, para matizar que dicha iniciativa la registraría «con el compromiso de una inmediata convocatoria de elecciones generales».. El Reglamento del Congreso recoge que una moción de censura contra el Gobierno debe ser propuesta por, al menos, la décima parte de los diputados. Esto es, 35 parlamentarios. Pero Vox solo tiene 33. Por eso busca ahora la manera de conseguir esos dos apoyos que le faltan. «El que tenga que rechazarlo, pregúntele por qué no está dispuesto a apoyar una moción de censura», ha sostenido Abascal. «Yo ya sé cuáles son los argumentos de algunos, y no valen para nada», ha ahondado, refiriéndose a la tesis de Feijóo, que cree que registrar una moción que no vaya a salir adelante supone reforzar a Pedro Sánchez.. Sin embargo, Vox ya no va a dar más pasos en este sentido, sino que va a permanecer a la espera. «No vamos a estar mendigando diputado tras diputado a ver quién quiere sumarse a esta moción», ha manifestado Abascal, que descarta hacer «llamaditas telefónicas» a otros parlamentarios para tantear posibles apoyos. No habrá, pues, conversaciones con los populares en este sentido si no son los diputados de Feijóo quienes levantan el teléfono.. En Vox, no obstante, no tienen grandes expectativas en poder llevar a término la última baza con la que juegan. Abascal ha reconocido que «no hay bases ahora mismo» para «ponerse de acuerdo» con el PP. Ha sido muy crítico, una vez más, el líder de Vox con la postura de los populares: «Si están dispuestos a algo, pues nos sentaremos. Pero hasta ahora, [en ellos] solo hemos visto el desdén, la inacción y la incapacidad de hacer lo que hay que hacer en España y en Europa».. «Me sorprende es la falta de reacción del PP», ha reflexionado Abascal, que ha ido incluso un paso más allá en sus acusaciones a los populares. «Quizá el PP está inhabilitado porque se siente asustado ante el PSOE, ante la acusación mutua de corrupción», ha expresado, sosteniendo que los de Feijóo son «absolutamente incapaces de dar la batalla» porque están «inhabilitados por casos que se van a juzgar dentro de poco». «Me preocupa eso en la medida en que dificulta la alternativa», ha agregado Abascal.. «Vox lo ha hecho todo, lo puedo decir con orgullo y con la conciencia tranquila. Otros no». Ha sido la tesis que ha repetido una y otra vez el presidente de Vox, que este lunes ha decidido ser él mismo quien ofreciera la rueda de prensa posterior al Comité de Acción Política de la formación. Hacía cinco meses que Abascal no respondía a preguntas de los medios desde la sede del partido.
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