Promotores e inversores piden que se reduzca la carga fiscal del ‘ladrillo’ y que se apueste por la propiedad frente al mercado del alquiler Leer
Promotores e inversores piden que se reduzca la carga fiscal del ‘ladrillo’ y que se apueste por la propiedad frente al mercado del alquiler Leer
El acceso a la vivienda es hoy uno de los grandes retos de la economía española y en el sector inmobiliario reclaman de manera urgente medidas que permitan hacer frente al déficit de casas que agrava la situación del mercado y reduzca la presión en las grandes ciudades. Entre esas medidas, promotores e inversores han pedido este jueves al Gobierno que suavice la presión fiscal sobre el ladrillo y que garantice la seguridad jurídica en el país para conseguir atraer capital extranjero y aumentar la producción de casas.. «No habrá crecimiento económico si no se invierte en vivienda», ha asegurado Íñigo Fernández de Mesa, presidente del Instituto de Estudios Económicos (IEE) y vicepresidente económico de CEOE, durante su intervención en una jornada organizada por el gestor de activos inmobiliarios Aliseda. De Mesa ha dicho que «tiene que haber un boom de producción» para que atajar el problema de accesibilidad sea viable, y lo hizo delante de un auditorio repleto de promotores e inversores que asentían ante su diagnóstico.. En su opinión, ni el marco regulatorio actual ni la falta de mano de obra juegan a favor de la coyuntura. «Se deben quitar todas las normativas de control de precios, luchar contra la ocupación y explicar al Gobierno desde todos los ámbitos que es muy importante que haya seguridad jurídica», ha asegurado. Aunque si hay otro elemento que considera fundamental para impulsar un cambio en el mercado es todo lo que tiene que ver con la fiscalidad de la vivienda. «No somos conscientes de lo que pagamos en España, mientras que en otros países como Italia, Dinamarca u Holanda, esa fiscalidad es negativa», ha afirmado.. Tanto Fernández de Mesa como el resto de participantes en la sesión han coincidido en una petición al unísono: es necesario rebajar los impuestos sobre la vivienda (IVA, IRPF, ITP, IBI…). «Yo le diría al Ejecutivo que revise la fiscalidad de la vivienda y que haya que rebajarla porque no es progresiva y no impulsa un sector que es clave», ha dicho. Todos también han coincidido en que no lo ven una opción plausible en el corto plazo, entre otras cosas porque gran parte de la recaudación de los ayuntamientos procede de esta vía y reducirla supondría tener que buscar otras alternativas. «No van a bajar impuestos porque el inmobiliario en España ha sido la gallina de los huevos de oro y lo va a seguir siendo», ha resumido el economista Gonzalo Bernardos.. Hasta que eso ocurra, el también profesor de la Universidad de Barcelona ha recomendado medidas «de cirugía fina», como agilizar los trámites para desarrollar promociones, apostar por la propiedad en lugar del alquiler o construir en altura. «En el suelo, mucho verde pero rodeado de mucha altura», ha resumido.. El testigo se lo ha cogido Paloma Martín, vicesecretaria de Desarrollo Sostenible del PP, que ha comenzado su intervención diciendo, tajante, que «el diagnóstico actual de la vivienda es demoledor». Ante ese escenario, Martín ha enumerado la propuesta de los populares en materia residencial, que pasa entre otras cosas por reducir los impuestos a nivel nacional, poner más suelo público a disposición de los promotores, derogar la Ley de Vivienda, acabar con las zonas tensionadas, defender la propiedad privada, acabar con la ocupación y la «inquiocupación» y lanzar una Ley del Suelo.. «Nosotros proponemos la rebaja del ITP al 4% y pedimos al Gobierno que reduzca también al 4% el IVA a la compra de vivienda. No podemos condenar a una generación entera a alquilar a precios prohibitivos», ha anunciado ante un auditorio que estaba mayoritariamente a favor de las recetas que exponía Martín.. «La fiscalidad es importantísima», ha seguido Eduard Mendiluce, CEO de Aliseda, la mayor comercializadora y vendedora de suelo en España. «No puede ser que necesitemos parque de vivienda asequible en alquiler y que toda la cadena de valor lleve a una carga de valor fiscal acumulada superior al 40%. No es justo que estemos en niveles cercanos a lo que podría llamarse confiscatorio. Las reglas de lo que se debe hacer están muy claras y solamente hay que hacerlo», ha concluido.
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