María Teresa Campos tendrá su calle en Málaga. Y hasta eso se está criticando estos días. Y no precisamente por la gente que caminará por su calle, sino por los programas del corazón adictos a forzar la polémica donde no hay polémica. Esos mismos programas que dejaban perpleja a María Teresa Campos cuando se inventaban a su medida instantes de su cotidianidad para favorecer escarnios con los que rellenar horas de televisión. Aunque solo fueran mentira. Ella estaba acostumbrada a otro tipo de prensa rosa: la que llamaba antes de hablar, la que contrastaba antes de saltar sobre el charco y salpicar a protagonistas y al público. Porque la prensa que fuerza los temas para ganar un titular siempre termina manchando. A la propia sociedad, inclusive.. El nombre de María Teresa Campos se sigue poniendo en la diana de la conversación social porque su combinación de profesionalidad, creatividad, carácter y naturalidad logró que sus programas construyeran un fuerte lazo emocional con la audiencia española. El público se sentía reflejado en María Teresa. Un vínculo que traspasa los años. Lo que propicia que se utilice el reclamo de su nombre y el de sus hijas para intentar seguir generando un culebrón. Aunque se retuerza la realidad hasta desvirtuarla.. Y la última trama ultraprocesada es con esa gran calle con la que el ayuntamiento de Málaga homenajea a María Teresa: que si está en un descampado, que si las hijas no quieren inaugurarla… Pero la verdad es bastante más aburrida, así que hay que inflarla de dimes y diretes. Sin embargo, el espectador ya no se los crees. Sabe que este tipo de programas venden humo y los ha terminado rechazando. Se marcha de aquellos que aturullan porque dan rodeos para no llegar nunca a ninguna parte. Lo vemos estos días con La familia de la tele, donde hasta crearon un cebo sobre la calle de Teresa. Y, a la hora de desarrollar el tema, hablan de todo y no hablan de nada. Cuando en la televisión de hoy, el público se queda en lugares donde no solo basta con que exista una historia, sobre todo se debe contar bien esa historia. Una de las virtudes de María Teresa Campos: su cualidad de narrar, por su habilidad para escuchar.. ¿Cuál es la verdadera historia de la calle de María Teresa Campos? La calle Periodista María Teresa Campos está en una zona de desarrollo de Málaga que ya lleva el nombre de otras grandes mujeres de nuestra cultura, como la inspiradora pianista Alicia de Larrocha o la actriz y cantante Imperio Argentina. Además, está cerca del colegio Clara Campoamor y el Palacio de Deportes. Una zona de expansión, muy cerca de la playa de Sacaba. Con guasa incluida, pues ahí se acaba la playa. Se podía haber puesto la placa ya mismo para lograr la foto del impaciente show del morbo nacional. A pleno solazo incluso. Pero como hay calles que serán para la posteridad, se ha decidido esperar a que se vayan construyendo los edificios que darán vida a la vía. No hay prisa. Aunque, claro, tampoco hay tema para los programas del corazón que andan secos de reclamos.
María Teresa Campos tendrá su calle en Málaga. Y hasta eso se está criticando estos días. Y no precisamente por la gente que caminará por su calle, sino…
María Teresa Campos tendrá su calle en Málaga. Y hasta eso se está criticando estos días. Y no precisamente por la gente que caminará por su calle, sino por los programas del corazón adictos a forzar la polémica donde no hay polémica. Esos mismos programas que dejaban perpleja a María Teresa Campos cuando se inventaban a su medida instantes de su cotidianidad para favorecer escarnios con los que rellenar horas de televisión. Aunque solo fueran mentira. Ella estaba acostumbrada a otro tipo de prensa rosa: la que llamaba antes de hablar, la que contrastaba antes de saltar sobre el charco y salpicar a protagonistas y al público. Porque la prensa que fuerza los temas para ganar un titular siempre termina manchando. A la propia sociedad, inclusive.. El nombre de María Teresa Campos se sigue poniendo en la diana de la conversación social porque su combinación de profesionalidad, creatividad, carácter y naturalidad logró que sus programas construyeran un fuerte lazo emocional con la audiencia española. El público se sentía reflejado en María Teresa. Un vínculo que traspasa los años. Lo que propicia que se utilice el reclamo de su nombre y el de sus hijas para intentar seguir generando un culebrón. Aunque se retuerza la realidad hasta desvirtuarla.. Y la última trama ultraprocesada es con esa gran calle con la que el ayuntamiento de Málaga homenajea a María Teresa: que si está en un descampado, que si las hijas no quieren inaugurarla… Pero la verdad es bastante más aburrida, así que hay que inflarla de dimes y diretes. Sin embargo, el espectador ya no se los crees. Sabe que este tipo de programas venden humo y los ha terminado rechazando. Se marcha de aquellos que aturullan porque dan rodeos para no llegar nunca a ninguna parte. Lo vemos estos días con La familia de la tele, donde hasta crearon un cebo sobre la calle de Teresa. Y, a la hora de desarrollar el tema, hablan de todo y no hablan de nada. Cuando en la televisión de hoy, el público se queda en lugares donde no solo basta con que exista una historia, sobre todo se debe contar bien esa historia. Una de las virtudes de María Teresa Campos: su cualidad de narrar, por su habilidad para escuchar.. ¿Cuál es la verdadera historia de la calle de María Teresa Campos? La calle Periodista María Teresa Campos está en una zona de desarrollo de Málaga que ya lleva el nombre de otras grandes mujeres de nuestra cultura, como la inspiradora pianista Alicia de Larrocha o la actriz y cantante Imperio Argentina. Además, está cerca del colegio Clara Campoamor y el Palacio de Deportes. Una zona de expansión, muy cerca de la playa de Sacaba. Con guasa incluida, pues ahí se acaba la playa. Se podía haber puesto la placa ya mismo para lograr la foto del impaciente show del morbo nacional. A pleno solazo incluso. Pero como hay calles que serán para la posteridad, se ha decidido esperar a que se vayan construyendo los edificios que darán vida a la vía. No hay prisa. Aunque, claro, tampoco hay tema para los programas del corazón que andan secos de reclamos.. La calle de María Teresa Campos en Málaga, en una zona de expansión de la ciudad.20m
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