Tras sus problemas en la ‘sprint race’, el holandés marca el mejor crono (1:20.520) y partirá por delante de Russell y Norris, con Sainz séptimo, justo por delante del asturiano. Leer
Tras sus problemas en la ‘sprint race’, el holandés marca el mejor crono (1:20.520) y partirá por delante de Russell y Norris, con Sainz séptimo, justo por delante del asturiano. Leer
En cuatro horas, las que separaron la sprint race de su vuelta en la Q3, Max Verstappen convirtió un coche inservible en otro capaz de marcar la pole (1:20.520) en Qatar. La prodigiosa evolución de Red Bull, con nuevos reglajes en el RB20, dejó con cara de pasmo a George Russell, 55 milésimas más lento y Lando Norris, que se las prometía muy felices tras el doblete de McLaren en la carrera vespertina. No hubo antídoto posible ante el flamante tetracampeón mundial, que volverá a comandar la parrilla 11 carreras después.. «No esperaba un cambio tan radical en el rendimiento. He sentido el coche muy estable», admitió Verstappen, cuya ganancia respecto a su mejor crono de la qualy del viernes se cifró en ocho décimas. Su último intento iba a causar tanto asombro como el modo en que, unos minutos, se había cruzado ante Russell. La ralentización no ocasionó mayores daños y la FIA hará caja con su multa a Red Bull.. Lo que queda fuera de toda duda es que cuando irrumpe el holandés volador, la competencia se queda sin argumentos. También Ferrari, cuyas opciones en el Mundial de Constructores menguan con el paso de las horas. El quinto puesto de Charles Leclerc y el séptimo de Carlos Sainz se antojan insuficientes frente a McLaren, que alzará su primer título desde 1998 si mañana suma 15 puntos más que la Scuderia.. Sobre un asfalto a 22ºC, con mejoras estructurales que bajaban 3,4 segundos el tiempo por vuelta respecto a 2023, a Sainz se le notó siempre incómodo. Las vertiginosas curvas de Losail resultaban poco propicias para su coche. «Es lo que esperábamos aquí, quedar a dos y tres décimas de la cabeza», admitió el madrileño, tras sufrir demasiado subviraje con el neumático blando. Para colmo de males, en la Q2 sus mecánicos le liberaron en el momento erróneo y sólo el frenazo evitó la colisión con Lewis Hamilton en el pit-lane.. Aun con un punto extra de inspiración, Leclerc tampoco pudo apuntarse a la caza mayor. Su tercer puesto en la Q2, a 31 centésimas de Verstappen, se desvanecería un cuarto de hora después. Desde el lado limpio de la parrilla, el monegasco deberá presionar a Norris y Oscar Piastri, asumiendo los riesgos propios de una situación límite.. Más alentadora se presenta la carrera para Fernando Alonso desde el octavo escalón de la parrilla. Durante la sprint race ni siquiera podía seguir el rastro de Pierre Gasly, pero a una vuelta, el asturiano exprimió el potencial de su monoplaza. Con el neumático blando, tan difícil de desentrañar para McLaren, Aston Martin confirmó su paso adelante.. Alonso, el sábado, en el ‘pit-lane’ de Losail.AFP. El AMR24 se mostraba aún más competitivo que la víspera, que ya había supuesto una indiscutible mejora respecto a Austin, Brasil o México. Sin embargo, con el quinto mejor tiempo de la Q1, el equipo de Mike Krack empleó otro juego de nuevos con Alonso. No había riesgo de eliminación, así que esa decisión sólo podía explicarse como preparativo de cara a la segunda criba.. El bicampeón sólo había rodado 89 milésimas más lento que Russell y Lance Stroll también se mantenía fuera del alcance de Williams y Visa Cash App RB. Sin embargo, a la hora de la verdad, el canadiense pinchó en hueso, mientras Fernando, tras abortar su primer intento, deslumbró con una vuelta casi perfecta (1:21.20). En la Q3, tras un crono borrado por superar los límites de la pista, Fernando también pudo darse el gusto de desbancar a Kevin Magnussen y Sergio Pérez.
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