La agresión a Dimitrievski le costó su segunda roja en LaLiga, pero Soto Grado no reflejó que fue con el balón parado, lo que rebajaría la sanción. Ancelotti advierte de que van a recurrir y eso puede afectar a la Supercopa Leer
La agresión a Dimitrievski le costó su segunda roja en LaLiga, pero Soto Grado no reflejó que fue con el balón parado, lo que rebajaría la sanción. Ancelotti advierte de que van a recurrir y eso puede afectar a la Supercopa Leer
Mestalla es un estadio en el que Vinicius Jr. se desquicia y acaba expulsado por roja directa. Las dos únicas que ha visto desde que juega en España se las mostraron ante el Valencia en el campo de la Avenida de Suecia. Le ocurrió hace dos temporadas después de, con el marcador en contra, perder el control y dar un manotazo a Hugo Duro. Se marchó del campo denunciando insultos racistas, que aún se investigan en un juzgado, y con gestos de ‘a segunda’ a la grada. Aquella roja le fue retirada por el comité de competición y no conllevó castigo. La que vio anoche lo tendrá, pero cómo el colegiado justificó su decisión en el acta le puede ‘salvar’ de una sanción ejemplar.. Vinicius fue expulsado en el minuto 79 tras una agresión a Dimitrievski. El meta valencianista le tocó la espalda para que se levantara tras una fallida jugada de ataque, anulada por fuera de juego previo, y el brasileño se revolvió con una agresión. Soto Grado zanjó la polémica con dos amarillas, pero desde el VAR Muñiz Ruiz le avisó de que lo ocurrido podía ser «conducta violenta».. Los audios publicados por la RFEF recogen que el árbitro confirma que va a sacar roja, «por golpear con los brazos en la cara del portero» y pregunta si el balón está parado, a lo que su compañero responde: «Efectivamente». En una revisión minuciosa, se ve que el momento en que el árbitro pita fuera de juego en la acción previa y el momento de la agresión son prácticamente el mismo.. Sin embargo, en la redacción del acta, Soto Grado hace una matización que puede beneficiar al jugador del Real Madrid. «En el minuto 79 el jugador Vinicius fue expulsado por el siguiente motivo: golpear a un adversario en la cabeza de manera deliberada, sin estar el balón en disputa, empleando fuerza no insignificante. Una vez expulsado, dicho jugador tuvo que ser sujetado por miembros de su club y retirado a vestuarios mientras continuaban sus protestas».. La clave para la interpretación de los comités es que si balón está parado, la sanción puede ir de cuatro a 12 partidos, como le ocurrió al jugador del Leganés Óscar Rodríguez por agarrar del cuello a Yeremy Pino, porque se le aplicaría artículo 103: «Agredir a otro/a, sin causar lesión, ponderándose como factor determinante del elemento doloso, necesario en esta infracción, la circunstancia de que la acción tenga lugar estando el juego detenido o a distancia tal de donde el mismo se desarrolla que resulte imposible intervenir en un lance de aquél, se sancionará con suspensión de cuatro a doce partidos».. Pero si la consideración es que la agresión se produce «sin estar el balón en disputa», el castigo puede quedarse en dos partidos.. Sea cual sea la interpretación, el Real Madrid va a recurrir para evitar una sanción que, si supera las dos jornadas, puede afectarle en Copa, el próximo domingo ante el Deportiva Minera en Cartagena, o en la Supercopa de España, que arranca el próximo jueves ante el Mallorca en Jeddha.. Ancelotti espera al jugador porque ni siquiera vio expulsión. «Vamos a recurrir. Lo que pensamos es que no era roja, que eran dos amarillas. Ha sido un toque de Dimitrievski antes y un empujón de Vini luego, con dos amarillas el tema se acababa. No quiero decir que ha caído en la trampa. Ha intentado hacer las cosas como siempre, hacer su partido. A veces le sale bien y a veces un poco menos. Y nada más, sigue siendo un jugador determinante para nosotros», justificó el técnico italiano, que no ocultó la mala primera parte del Real Madrid. «Es difícil explicar lo mal que lo hicimos en la primera parte y lo bien en la segunda con uno menos. No podemos mostrar estas dos caras», se lamentó, como también por los penaltis fallados. «Creo que tengo que tomar yo la responsabilidad de elegir quién va a tirar», advirtió.. A Vinicius le ayudó que su compañeros fueran capaces de remontar el partido y, por eso, les pidió «perdón» y les dio las «gracias» en redes sociales. Sin embargo, ese post no estuvo exento de polémica.. El brasileño añade un emoticono de dos dedos, un gesto que dirigió a la grada de Mestalla durante varios momentos del partido en los que le silbaban o coreaban la burla ‘Balón de playa, Vinicius, balón de playa’.. De manera disimulada, pero recogida en imágenes de partido, el delantero hacía el gesto que ya reprodujo hace dos años en Mestalla. Esta vez, los jugadores del Valencia no se dieron cuenta, pero Hugo Duro le mandó un mensaje: «Que se dedique a jugar, que lo hace bastante bien, y que no se meta en guerras que no son suyas».
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